Vender un piso con inquilinos puede ser un proceso un poco más complicado que vender una propiedad desocupada. Sin embargo, es perfectamente legal y posible.
Si estas en esta situación hay algunos pasos y consideraciones importantes a tener en cuenta.
Consejos para vender un piso alquilado
Revisa el contrato de arrendamiento:
Antes de poner la propiedad en venta, debes revisar detenidamente el contrato de arrendamiento con los inquilinos. Verifica las cláusulas relacionadas con la terminación anticipada del contrato y las obligaciones tanto del arrendador como del arrendatario en caso de venta. Recuerda que el comprador deberá subrogarse en todos los derechos y obligaciones recogidos en el contrato.
Comunícate con los inquilinos
Es importante informar a los inquilinos sobre tus planes de vender la propiedad. Puedes organizar una reunión o enviar una carta para notificarles formalmente. Sé transparente y responde a cualquier pregunta o inquietud que puedan tener.
Evalúa el mercado
Antes de fijar un precio de venta, es recomendable investigar el mercado inmobiliario y obtener una valoración precisa de tu propiedad. Ten en cuenta que la presencia de inquilinos puede afectar el valor de mercado y la disposición de los compradores potenciales.
Menciona la situación en la publicidad
Al anunciar la propiedad, es importante mencionar que está siendo vendida con inquilinos. Esto ayudará a atraer a compradores interesados en adquirir una propiedad de inversión con ingresos inmediatos. También es útil proporcionar detalles sobre los términos del contrato de arrendamiento, como la duración restante y el alquiler mensual.
Coordina las visitas con los inquilinos
Si planeas mostrar la propiedad a posibles compradores, debes coordinar las visitas con los inquilinos. Respetar su privacidad y convenir horarios que sean convenientes para ambas partes es fundamental. Asegúrate de obtener su consentimiento antes de ingresar a la propiedad con compradores interesados.
Ofrece incentivos a los inquilinos
Si los inquilinos están preocupados por la venta de la propiedad y su posible reubicación, puedes considerar ofrecerles incentivos para facilitar el proceso. Por ejemplo, podrías ofrecerles ayuda en la búsqueda de una nueva vivienda, cubrir los costos de mudanza, o bien ofrecerles una compensación económica.
Destaca las ventajas para los compradores
Si hay inquilinos a largo plazo en la propiedad, resalta este hecho como una ventaja para los compradores potenciales. El hecho de que ya haya inquilinos estables puede ser atractivo, ya que genera ingresos inmediatos para los nuevos propietarios, si además pagan puntualmente y tienen cuidado el piso supondrá un gran aliciente para los que buscan una inversión segura.
Trabaja con profesionales inmobiliarios
Dado que vender una propiedad con inquilinos puede ser un proceso más complejo, es recomendable contar con la asesoría de profesionales inmobiliarios con experiencia en este tipo de ventas. Ellos podrán guiarte a lo largo del proceso, asegurándose de cumplir con todas las regulaciones y leyes aplicables.
Recuerda, por último, Respetar la privacidad de los inquilinos durante el proceso de venta. No revela su identidad ni información personal a los potenciales compradores.
